David Villa, el Rey del Mundial

'Villa, el mercader de la felicidad'. Así titulaba la crónica del España-Portugal del martes de uno de los diarios deportivos más prestigiosos del mundo, el francés 'L'Equipe' que ha sido uno más de los que se han rendido al fenómeno Villa en el Mundial de Sudáfrica. Antes de arrancar la Copa del Mundo, todos apostaban por que iba a ser una lucha entre Messi y Cristiano Ronaldo para alzarse con el título de ser el mejor en un Mundial. Pero entre ellos se ha colado un jugador asturiano que se está convirtiendo en el auténtico rey de Sudáfrica. Ese delantero se llama, como ya habrán podido adivinar, David Villa que lleva marcados cuatro goles en tres partidos y que podían haber sido cinco si no hubiese fallado el penalti ante Honduras.
Cuatro goles que han situado a David Villa en el firmamento futbolístico mundial. Ya lo estaba, es cierto, pero le faltaba el espaldarazo en un Mundial para que todo el mundo le conociera. Ahora ya lo conocen y se quedan con la boca abierta viendo sus jugadas y sus goles. A muchos les extrañará que juegue por la banda y no como delantero centro, pero es que ahí, con espacios es donde Villa se mueve como pez en el agua. Por eso, cuando todos alaban su juego y su capacidad goleadora, él siempre recuerda que lo importante es el equipo y da las gracias a todos sus compañeros, especialmente a Fernando Torres, porque sin ellos, él no podría hacer nada. Ahí es donde Villa demuestra su generosidad y compromiso con unos colores que otros jugadores más famosos y galácticos no tienen.
El delantero asturiano ha llegado a esta cita mundialista en plena forma física y, sobre todo, tranquilo. La 'culpa', por decirlo de alguna manera, la tiene el Barça que le fichó antes de que comenzase el Mundial. Tener resuelto su futuro era básico para un jugador que lo pasó muy mal en la Copa Confederaciones de hace un año cuando en Sudáfrica no sabía si iba a seguir en el Valencia o marcharse. Eso le provocó un estado de nerviosismo por él y por los suyos que le perjudicó mucho en su rendimiento. Ahora, la situación ha cambiado y ya habla como un culé más desde su fichaje aunque sea hoy, día 1 de julio, cuando oficialmente es nuevo jugador del Barça. Un club, el azulgrana que debe de estar contento con lo que está haciendo David Villa en Sudáfrica. Sí, porque el año que viene, en sus filas tendrá al rey del mundo, Leo Messi, y, seguramente, al rey del Mundial, el 'Guaje'. ¡Vaya pareja de reyes!